1Cor: 3, 18-23 Comentario: Distintas fidelidades y pertenencias marcan nuestra vida. decimos: "Soy de tal barrio, soy de tal equipo de football, soy de tal o cual grupo o movimiento eclesial". En la lectura San Pablo nos recuerda que nuestra verdadera pertenencia y alianza, que da sentido a toda nuestra vida es: "Ustedes son de Cristo". Los ojos de Pablo nos ofrece un grandioso final: "Todo es de ustedes, ustedes son de Cristo, Cristo es de Dios"(22 s). El Apostol remata esta parte de la carta volviendo al tema del principio: No pertenecen a Pablo o a Apolo o a Cefas, viene a decir. Al contrario, ellos les pertenecen a ustedes como ministros y colaboradores de Dios al servicio de la comunidad. O lo que es lo mismo, no son los cristianos los que esytán al servicio de la institución o de la jerarquía de la Iglesia por más alta que esta sea, o de cualquier movimiento eclesial de turno. Al revés. No podemos enajenar nuestra libertad de pensar y de act...
"Juan bautizó con agua, pero ustedes serán bautizados en el Espíritu Santo que descenderá sobre ustedes y serán mis testigos" Act: 1, 5-8. El Espíritu Santo hace misioneros con el testimonio y con la palabra. Somos elegidos de Dios para llevar su "anuncio" hasta los confines de la tierra. Es una elección personal y un envío intransferible.