Historias de vida, pensamientos para enfrentar problemas, fortalecer el alma y el espíritu, un dulce maná de reflexiones para hacer de la realidad un sueño. El anciano Un anciano que pasaba los días sentado en un banco de la plaza que estaba a la entrada del pueblo, era muy querido por sus vecinos y siempre contestaba con mucha sabiduría a cualquier pregunta que le hicieran. Un día, un joven se le acercó y le preguntó: –Hola, señor, acabo de llegar a este pueblo, ¿Me puede decir, cómo es la gente de este lugar? –Hola hijo, ¿De dónde vienes? Preguntó el anciano. –De un pueblo muy lejano. –Dime, ¿Como es la gente allí? –Son egoístas, envidiosos, malvados, estafadores… por eso me fui de aquel lugar en busca de mejores vecinos. –Lamento decírtelo, querido amigo, pero los habitantes de aquí son iguales a los de tu ciudad. El joven, lo saludó y siguió viaje. Al siguiente día pasó otro joven, que acercándose al anciano, le hizo la misma pregunta: –Acabo de llegar...
"Juan bautizó con agua, pero ustedes serán bautizados en el Espíritu Santo que descenderá sobre ustedes y serán mis testigos" Act: 1, 5-8. El Espíritu Santo hace misioneros con el testimonio y con la palabra. Somos elegidos de Dios para llevar su "anuncio" hasta los confines de la tierra. Es una elección personal y un envío intransferible.