5.1. Criterios para
determinar la organización del objeto de estudio.
Un mismo objeto de
estudio, es decir, un mismo aspecto de la experiencia y de la cultura puede ser
presentado en diversa manera, según el criterio que se adopte. También en el
ámbito de la catequética y de la acción pastoral se han propuesto varios
criterios y formas de organizar el contenido de la fe y la vida cristiana. Lo
propio hacen también hoy algunos sectores educativos, gubernamentales y de la
pedagogía cuando se trata de intervenir en el debate sobre el contenido de la Educación Religiosa.
Se presenta a continuación una reseña de esos modelos con el fin de que
aparezcan con mayor claridad los criterios con los cuales se han elaborado los
estándares
5.1.1. Desde el punto de
vista de la confesionalidad.
En los últimos años se ha
presentado el debate sobre la incidencia de la pluralidad religiosa en el
contenido de la
Educación Religiosa. Esto ha conducido a delimitar varios
modelos de Educación Religiosa, al menos como planteamientos teóricos.
Cultura religiosa: Se
refiere a una enseñanza cuyo objeto es el estudio comparado de las religiones,
a veces identificando principalmente sus aspectos comunes y omitiendo sus
diferencias y particularidades. Lo religioso se toma como elemento cultural,
esto es, como algo producido por el ser humano, omitiendo el carácter de
Revelación, para el caso del cristianismo.
Educación Religiosa
confesional: Se refiere a una enseñanza cuyo objeto es el conjunto de elementos
básicos y esenciales de un credo religioso particular. Se busca en este caso
que la Educación
Religiosa se ajuste a las convicciones del tipo de Educación
Religiosa escogido por los padres de familia para sus hijos.
Educación interreligiosa y
ecuménica: se refiere a una enseñanza cuyo objeto es el conocimiento de un
credo religioso, pero realizando simultáneamente un conocimiento de los otros y
con participación de diversos credos. Se trataría de aplicar el principio de
conocer la propia identidad religiosa y la de los otros.
5.1.2. Desde el punto de
vista de la definición del objeto de estudio religioso.
Otra discusión que surge y
que requiere una delimitación en la actualización de los estándares es la forma
de definir el objeto de estudio, dentro del modelo de Educación Religiosa
vinculada a un credo religioso. Al respecto ayuda mucho tener en cuenta la
distinción que se hace dentro de las ciencias de la religión, entre los
aspectos subjetivos o lo que constituye propiamente la experiencia personal e interior
de relación con Dios y las expresiones u objetivaciones de la religión
(tradiciones, narraciones, actos de culto, normas morales, doctrina, formas de
organización comunitaria etc.). Los dos aspectos forman lo que se llama la
experiencia religiosa y si se quiere enseñar un credo, no pueden separarse. Sin
embargo en la forma de presentar los contenidos de la Educación Religiosa ,
pueden presentarse varios modelos, en la definición del objeto de estudio y de
enseñanza.
Como un proceso de fe. En
este caso se trata de seleccionar los temas según los pasos de un proceso
evangelizador. Por Ej. Siguiendo los sacramentos de iniciación cristiana,
entonces se diría en grado l el Bautismo, en grado 2 la Eucaristía , en grado 3
la confirmación etc. Otro ejemplo puede ser el de proponer un esquema como el
siguiente: Grado 1: preevangelización, Grado 2: primer anuncio, grado 3:
catequesis, grado 4: celebración de la fe etc.
Como realización de un
plan de pastoral: En este caso se trataría de organizar los contenidos llevando
a la educación religiosa escolar los itinerarios y contenidos establecidos en
los planes pastorales de las Iglesias particulares y distribuyéndolos por
grados. Esto se haría con la intención de colocar esa educación al servicio del
proceso pastoral que lleva una Iglesia.
Como desarrollo de una
estructura lógica: En este caso se organizan los contenidos, según la
estructura de la disciplina de referencia. En este caso se trata de distribuir
los temas según la forma como los organiza una determinada teología, o por
ejemplo la forma como está organizado el contenido de la fe en el Catecismo de la Iglesia Católica.
Entonces se diría en grado 1 el credo, en grado 2, los sacramentos, en grado 3
los mandamientos, en grado 4, la oración cristiana.
Como expresiones de la
experiencia de fe: En un primer modelo se entiende el contenido de la educación
religiosa como las objetivaciones de la experiencia de fe cristiana, tales como
la Biblia , la
doctrina, los sacramentos, la moral cristiana, las oraciones. En este sentido
se enuncian los contenidos en la siguiente forma: "La Eucaristía es el pan de
vida eterna"
Como experiencia de fe: En
un segundo modelo se entiende el contenido como la experiencia religiosa de fe
cristiana, es decir, el cristianismo vivido y en ése contexto vital las
expresiones u objetivaciones de esa experiencia entendidas como elementos
integrantes e inseparables de ella. En este sentido se enuncia el contenido
partiendo de la vida cristiana: "El cristiano en la Eucaristía encuentra la
respuesta a su sed de vida plena". Este es un planteamiento que va de lo
antropológico a lo teologal, en el sentido de que no se parte del mensaje
cristiano sino de la experiencia y a partir de ella se busca llegar al mensaje.
Esta es la perspectiva que traían los programas de Educación Religiosa14 y que
se mantiene en los presentes lineamientos y estándares.
5.1.3. Desde el punto de
vista del diálogo con la cultura.
Además de la dimensión de
diálogo ecuménico e interreligioso que hoy se le está pidiendo a la Educación Religiosa ,
hay otro aspecto relacionado también con el contenido, que es el dialogo con la
cultura, con las áreas y saberes escolares, con los problemas de los
estudiantes, con los problemas sociales. Hablando de este tema el Directorio
General para la Catequesis
dice: "Este diálogo debe establecerse ante todo, en aquel nivel en que
cada disciplina configura la personalidad del estudiante. Así, la presentación
del mensaje cristiano incidirá en el modo de concebir, desde el Evangelio, el
origen del mundo y el sentido de la historia, el fundamento de los valores
éticos, la función de las religiones en la cultura, el destino del hombre, la
relación con la naturaleza…La enseñanza religiosa escolar, mediante este
diálogo interdisciplinario, funda, potencia, desarrolla y completa la acción
educadora de la escuela" (No 73). Esta perspectiva también se adopta en
los presentes estándares.
5.1.4. Desde el punto de
vista antropológico
Cuando se quiere adoptar
el criterio del método antropológico15, y partir del hombre para llegar a Dios,
se pueden definir unos contenidos y organizarlos en varias formas como las
siguientes:
En perspectiva de
sicología evolutiva. Se trata de determinar cuáles sean los centros de interés
del estudiante en cada edad y grado, para organizar los temas de la vida
cristiana que se adaptarían más al estadio o etapa del desarrollo psicológico y
a los intereses de losgrupos particulares de cada contexto.
En perspectiva cultural.
Se busca definir los contenidos u objetos de enseñanza de acuerdo a los
interrogantes o intereses propios de un contexto social y cultural.
En perspectiva
antropológica: Se determinan experiencias humanas significativas y
trascendentales para la búsqueda de sentido y valor de la vida, e igualmente
importantes para el anuncio del Evangelio porque ocupan un lugar central en su
mensaje. En este caso la selección de experiencias se hace independientemente
de la edad o del contexto cultural y religioso. Esta es la perspectiva que se
adopta en los presentes estándares, con la experiencia seleccionada para cada
grado.
Comentarios